Para mi musa
Quédate entre mis sábanas
cuando el sol se asome en el horizonte
y los pájaros te despierten con sus cantos.
Quédate a mi lado amor
ocupa tu lugar en mi cama vacía.
Quédate conmigo en los días de lluvia
sin hacer caso de los nubarrones
en los días que el cielo presagia tempestad.
Quédate bajo mi paraguas princesa
bajo el ala de mi amor que te protege.
Quédate cuando mi alma se agrie
cuando el ácido de mi amor te corroa
y la amargura de mi alma te abrume.
Quédate cuando me infecte con mi propio veneno
porque la dulzura de tu amor es mi única cura.
Quédate aunque no te lo pida
aunque sientas que el amor está gastado
si sientes que mis palabras son vanas y mis caricias frías.
Quédate cuando menos lo merezca
porque será cuando más lo necesite.
Quédate sin importar las palabras
sin que interese lo que mi boca diga
ni lo que mi mente haga para alejarte.
Quédate a escuchar lo que dice mi corazón
cada latido que grita tu nombre.
Quédate para silenciar a los necios
para callar las voces de los ignorantes
los que creen que no podemos estar juntos.
Quédate para amordazar su envidia
para demostrarles que mereces ser feliz conmigo.
Quédate entre mis brazos
disfrutando las mieles de mis besos
soportando las embestidas de mi pasión.
Quédate a disfrutar el fuego de mi deseo
la llama que te hace vibrar de amor.
Quédate a disfrutar de los días
a sentir como se desvanecen entre las caricias
como fluyen por la fuerza del amor
y desaparecen condenándonos al olvido.
Quédate para vivir a tu lado cada día como si fuera el último